Pues para empezar con las reseñas de la temporada anime de otoño empezaré con Shokugeki no Souma. Para empezar diré que esta reseña cuenta con spoilers, si no has visto la serie te recomiendo que veas la temporada pues no tiene desperdicio.
La temporada anterior quizás supo a demasiado poco con los 12 capítulos anteriores en la cual nos dejaba en suspense de lo que iba a pasar en la serie. En líneas generales debemos decir que la temporada no ha decepcionado nada. Primero hemos visto el enfrentamiento indirecto con uno de consejeros, con Kuga concretamente. Efectivamente la serie ha sabido transmitir la emoción de este arco perfectamente, de una cuesta arriba para Souma al proponerse vender en un puesto tan pequeño contra todo un restaurante. Consigue su objetivo pero solo el último día, un detalle a tener en cuenta pues aunque Souma es un diamante en bruto no es el clásico protagonista "invencible" que llega a escalar la cima rápidamente porque es talentoso.
Pero lo más esperado de la temporada sin duda es la llegada de la revolución del nuevo director, el padre de Nakiri. No sólo añade una emoción extra a la historia sino que conocemos un poco más al detalle el pasado de la propia academia en si. A opinión personal, lo más chocante es la personalidad de Erina Nakiri, pues en ocasiones su actitud puramente sumisa hacía su padre es desesperante. Todos tus amigos están intentando apartarte de un padre malvado y a él solo le basta con llamarla para hacer lo que quiera.
Quitando la relaciones personales (quitando la relación entre el padre de Nakiri y de Souma) este nuevo arco sigue añadiendo más expectación con la llegada de la Central que quiere revolucionar la escuela entera(cerrando todas las asociaciones e imponen una doctrina frente a la innovación) y de toda Japón. Sobretodo hay que destacar la batalla entre Souma y Eizan, que aunque obviamente se esperaba la victoria de Souma si sabe darle emoción a la batalla, dando un giro a las batallas contra la Central gracias a su victoria y a Isshiki. Esto le da la libertad a las asociaciones a responder contra la Central aunque la mayoría pierde, nuestros protagonistas saben darle guerra (aunque las últimas batallas solo nos muestran el resultado de victoria, cuando pudimos disfrutar de una batalla como la de Ryo que tuvo bastante emoción) y por supuesto lo que ha sido la batalla de la temporada (bastante resumida) es contra el primer consejero Eishiki. Una batalla que se nos presentaba con un Souma muy confiado en sus habilidades y con clara intención de ganar a Eishiki para evitar verse forzado a formar parte de la Central (ya que si perdía tenía que ser su ayudante de cocina) y seguir con el ideal de este. La serie vuelve a darnos un toque de realidad con una derrota de Souma clara ante el primer consejero que demuestra a estar en otro nivel pero reconociendo el talento de Souma y su peligro de tener a alguien como él a su lado.
La serie acaba con el giro del padre de Nakiri, en el cual se dan cuenta de que Souma es hijo Joichiro (no parecía evidente por el aspecto de este) que deja varios sentimientos enfrentados tanto al padre como a la propia Erina al enterarse de lo evidente. La temporada acaba así, pero por lo visto tenemos temporada para Enero, siguiendo todavía el arco de la Central que seguro que nos depara nuevas sorpresas y sobretodo promete nuevas batallas.
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